Esta noche de abril volví a echar de menos esa nada que había entre tú y yo. Esa nada tan sigilosa, delicada y sutil. A veces, más sexual.
Del amor una se muere tantas veces. Y vuelve a él suicidamente, siempre volvemos.
Esa nada que quedo anclada años atrás, esa nada resistió en algún lugar entre Córdoba y Calamaro.
Aquella nada tan solapada y torpe.
A veces, muy sexual.
Esa nada que quedo anclada años atrás, esa nada resistió en algún lugar entre Córdoba y Calamaro.
Aquella nada tan solapada y torpe.
A veces, muy sexual.
Tienes razon. Hay que nadar
ResponderEliminarEsa nada es mucho. Como para no volver.
ResponderEliminarBesazos.