miércoles, 22 de octubre de 2014

iónico versus convalente

Es agotador este otoño de ni frío ni calor. 

Las temperaruras siguen siendo tan asfixiantes como a principios de junio y así no hay manera de ponerse el abrigo. En AEMET ni siquiera se vislumbra una relevante bajada de temperaturas para la próxima semana y yo necesito el frío. En teoría lo aborrezco pero, sin saber por qué, en este momento me urge que todo se vuelva gélido. 

Este tiempo me recuerda tanto a junio. 

Ese mes me apetece mucho Cádiz y la primera visita al centro fenicio por excelencia, siempre implica un punto de inflexión para el resto del verano. El primer mar que quiero ver cada año siempre es el gaditano.

Este octubre me recuerda en grados centígrados a comienzos del verano. 

Así que probaré suerte y me voy pá Cádiz a respirar su sal.

Espero que en mi batalla iónica triunfe la sal y equilibre el empalagamiento mental que me persigue las últimas semanas.

2 comentarios:

  1. que suerte

    en Cádiz dejé algo más que unos años maravillosos...aunque me terminó de formar lo que ahora soy

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  2. Volverás como nueva y vendrá el frío detrás, todo organizado, verás.

    Disfruta!

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